¡Mi amigo Francisco es todo un éxito! ¡Él ha logrado fama y fortuna! Eso es lo que la gente dice acerca de mi querido amigo, cuando lo ven manejando su lujoso carro, y porque vive en una zona residencial de casas muy bonitas.

Después de todo, él acaba de comenzar un nuevo trabajo, que le permite viajar, le pagan muy bien, y puede darse el lujo de hacer las cosas que más le gustan. Sin embargo, mucha gente no ve el otro lado de Francisco -- el lado que sufrió le muerte de su esposa debido a una terrible enfermedad.

Ellos no saben la cantidad de horas que Francisco pasa, como diácono y maestro de la Biblia. No lo siguen al hospital donde les ministra a los enfermos. No tienen idea que Francisco apoya y aconseja a otros viudos “que han perdido a sus esposas”. Si, él es un éxito en los negocios, pero eso es “lo menos importante” en su vida.

El primer lugar se lo da a Jesús, “a su Señor”, y a su humilde ministerio. Él ayuda a parejas jóvenes en la escuela dominical, y aconseja a los viudos que se sienten solos y abrumados.

Él se ha dado cuenta “que ser el primero” no viene del dinero, sino de un humilde ministerio. Esta es la lección “que vamos a estudiar” en este pasaje de Lucas 14.

EMPECEMOS EN ORACIÓN

Padre, gracias por darnos tu Palabra. Gracias que tu Palabra es el estándar que necesitamos para vivir vidas piadosas y santas. Que no es suficiente tratar de ser buenas por nosotras mismas. Tú quieres cambiarnos. Quieres hacernos como Jesús. Quieres tener una relación íntima con nosotras.

Señor, Tú quieres que te amemos como Tú nos amas. Abre nuestros ojos y oídos espirituales para recibir lo que tienes hoy para nosotras. Tú eres nuestro pan de cada día. Queremos escuchar tu voz, sentir tu Presencia, sentir tu amor y compasión hacia nosotras. Queremos entregarnos totalmente a Ti. En el nombre de Jesús, Amén.

El título de este mensaje es ENTREGA TOTAL. Y aquí veremos dos aspectos de esta ENTREGA: (I) ENTREGA A DIOS - PARTE UNO; y (II) ENTREGA A DIOS - PARTE DOS.

¡ASÍ QUÉ! COMENCEMOS CON EL PRIMER ASPECTO… ENTREGA A DIOS – PARTE UNO (Lucas 14:25-27)

25Como grandes multitudes lo seguían, Jesús se volvió a ellos y les dijo: 26 Si alguno viene a Mí, y no renuncia a su padre y a su madre, ni a su mujer y sus hijos, ni a sus hermanos y hermanas, y ni siquiera a su propia vida, no puede ser Mi discípulo.

Jesús les trata de enseñar a las multitudes y a Sus discípulos, “que el discipulado dedicado” implica cargar una cruz, invitando a los que no han sido invitados, siendo el último en vez del primero, y terminar “con perseverancia” el curso que Jesús a trasado para nosotras.

El costo de seguir a Jesús, y de comprometernos a vivir la vida de la manera que Él nos pide, es mucho más “que lo que mucha gente” está dispuesta a pagar, A decir verdad, el discipulado no es nunca una decisión fácil. El discipulado requiere todo. No hay excepciones. Nadie, que se haya vuelto en discípulo de Cristo, ha vivido una vida fácil.

Una persona no puede ser discípulo de nuestro Señor, a menos “que seguir a Jesús sea lo más importante para él o ella “que cualquier otra cosa en este mundo”. ¿Parece imposible, no es cierto?

Lo increíble de todo esto “es que” cuanto más íntimamente conozcamos a Dios, quien nos creó, nuestra relación “se hará más preciosa” que todas nuestras relaciones, nuestros derechos, o nuestras riquezas. ¿Estamos listas para aceptar este reto?

La idea de DARLE el control de tu vida A OTRA PERSONAes totalmente contraria a la mentalidad de nuestra cultura de hoy. No queremos que nadie nos diga lo que tenemos que hacer. ¡Queremos estar en control de nuestra propia vida!

Pero, paradójicamente, nunca seremos realmente libres HASTA QUE NO NOS HAYAMOS ENTREGADO “TOTALMENTE” A LA PALABRA Y A LA VOLUNTAD DE DIOS. Cuanto más te entregues a Él, más descubrirás, que Jesús tiene TU MEJOR INTERÉS EN MENTE, y que Su voluntad es buena y aceptable y perfecta.

Cuando Jesús les dijo que renunciaran a su familia, Él les estaba recalcando, QUE EL AMOR POR ÉL, tiene que ser más grande que todos los otros amores de su vida. LO QUE JESÚS LES ESTABA DICIENDO era intensamente personal… y práctico.

Él identificó claramente las cosas que se debían entregar. Nuestras relaciones, nuestros afectos, nuestros cuerpos físicos, nuestros derechos, y nuestras posesiones. Ningún lazo familiar debe desviarnos del camino de total obediencia al Señor. Sin embargo, ¿qué pasa cuando pierdes tu trabajo, y las cuentas siguen viniendo.

Cuando estás esperando tu quinto hijo en siete años… Cuando tu esposo es diagnosticado con una enfermedad incurable. ¡Nuestra entrega a Cristo es probada! Es demostrada a diario… “elecciones y decisiones momento a momento”, a lo que te rindes a la soberanía y voluntad de Dios.

27Y el que NO TOMA SU CRUZ y me sigue, no puede ser mi discípulo. Una amiga, muy querida, que sufría de una enfermedad crónica, siempre me decía QUE ESA ENFERMEDAD ERA SU CRUZ.

Hay un gran malentendido con respecto a lo que significa tomar tu cruz. Un vecino pesado y gritón no es tu cruz. La artritis no es tu cruz. La presión económica no es tu cruz. Los vecinos, las enfermedades, y las finanzas no son tu cruz. ¡SON PARTE DE LA VIDA! Son las cosas comunes que les pasan a los cristianos, y a los no cristianos.

JESÚS NOS DEMOSTRÓ LO QUE LA CRUZ ES… ¡AL ENTREGAR SU VIDA POR NOSOTROS! La cruz es la forma, como nosotras morimos a nosotras mismas, para que otros puedan ser salvados, ayudados, redimidos y restaurados. Tomar tu cruz significa… ¡SACRIFICIO TOTAL EN TODO!

El camino a la “verdadera vida” es el camino a la muerte… ¡LA MUERTE AL YO! PREPÁRATE PARA ENTREGAR TODO, HASTA TUS RELACIONES… ¡PARA SEGUIR A JESÚS!

1 Reyes 20:1-4, dice, “Un día el rey Ben Adad de Siria reunió a todo su ejército, y convocó a treinta y dos reyes aliados, con su caballería y sus carros de combate, y se dirigió a Samaria para atacarla, y la sitió.

2Envió mensajeros al rey Ajab (el rey de Israel), que estaba en la ciudad, a que le dijeran: 3El rey Ben Adad te manda decir: “Tu plata y tu oro me pertenecen, lo mismo que tus mujeres y tus hermosos hijos.” 4El rey de Israel le respondió: “¡Por supuesto! ¡Todo lo que tengo le pertenece a Su Majestad!”

Lo que le pidió Ben Adad, el rey de Siria, fue ¡ENTREGA TOTAL! Y lo que Ajab le dio, fue lo que se le pidió: ¡ENTREGA TOTAL! Por eso, dijo, “¡Por supuesto! ¡Todo lo que tengo le pertenece a Su Majestad!” Básicamente, ¡AJAB SE RINDIO!

Estas son las palabras de ENTREGA TOTAL, con las cuales toda hija de Dios, debiera de rendirse a su Padre celestial. La condición de la bendición de Dios es… ¡ENTREGA TOTAL! Si nuestros corazones están dispuestos A HACER ESO, entonces no habrá límite a lo que Dios hará por nosotras… ¡y la bendición que Él nos dará!

¿Qué se necesita PARA VIVIR una vida entregada a Dios? Primero, Dios demanda ENTREGA TOTAL DE NOSOTRAS. Segundo. Dios no solo demanda NUESTRA ENTREGA TOTAL, sino que Él mismo la lleva a cabo.

Dios no nos pide una ENTREGA TOTAL por nuestras propias fuerzas, o por el poder de nuestra voluntad. ¡NO! ¡DIOS ES QUIEN HACE LA OBRA EN NOSOTRAS! Tercero. Dios no solo lo demanda… ¡Y LO HACE! sino que Dios también ACEPTA nuestra entrega.

¡DIOS OBRA EN LO MÁS PROFUNDO DE NUESTRO CORAZÓN! Dios nos motiva, por el poder de Su Espíritu , a que nos entreguemos totalmente a Él. Y Cuarto. TU ENTREGA TOTAL A DIOS te va a bendecir de una forma increíble.

Gary Thomas dijo, “Llegará el momento en nuestra vida cristiana… QUE, COMO JACOB, lucharemos toda la noche con Dios… pero al final terminaremos diciendo, “Muy bien, mi Dios, ¡Tú ganas! No mi voluntad sino la Tuya.”

A través de la historia, se le ha tenido a “MARÍA”, la madre de Jesús, EN MUY ALTA ESTIMA… ¡Y con toda razón! Ella fue escogida por Dios “para dar a luz” al esperado Mesías. PERO, poniendo de lado la importancia de su vida, miremos lo que significaba para María… “entregarse totalmente a la voluntad de Dios”.

María vivía en una pequeña aldea de Galilea, en Nazaret, donde todo el mundo sabía lo del todo el mundo . Ella tendría que vivir con la vergüenza, de su supuesto embarazo sin haberse casado . Y probablemente, TENERLE QUE EXPLICAR A SU MAMÁ LAS VISITAS DEL ANGEL, Y DEL ESPÍRITU SANTO… ¡NO CALMARÍA MUCHO LAS COSAS!

Y ni se diga del efecto “que todo este escándalo” tendría en sus planes de casarse con José. ¿Qué diría José? ¿Le creería a María? Teniendo en cuenta las ramificaciones personales de este evento, SU RESPUESTA AL ANGEL QUE LE DIO LA NOTICIA ACERCA DE SU ROL COMO MADRE DE JESÚS … ¡FUE ADMIRABLE!

María dijo en Lucas 1:38, “¡Yo soy la sierva del Señor! ¡Cúmplase en mí lo que has dicho!” En otras palabras, “Señor, yo soy Tu sierva. Estoy a Tu disposición. Mi cuerpo es Tuyo. Mi vientre es Tuyo. Mi vida es Tuya. María estuvo dispuesta “a dejar de lado” sus propios planes “para enlazar brazos con Dios” ¡Y CUMPLIR LOS PLANES DE DIOS!

¿Qué experiencia importante tendrá Dios preparada para ti? Todo comienza CON UNA ENTREGA TOTAL A ÉL. Cuando tú te ENTREGAS TOTALMENTE A DIOS, ¡Él comienza Su gran obra en tu vida!

Dios le dijo a Abrahán en Génesis 22:16-18, “POR ESO QUE HAS HECHO, de no negarme a tu único hijo… multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo… por cuanto atendiste a Mi voz”.

Desde la época de Abrahán, la gente ha sabido, que cuando obedecen la voz de Dios, y le entregan lo que es más preciado para ellos, ¡Dios lo multiplica mil veces más! ABRAHÁN ENTREGÓ A SU ÚNICO HIJO, A ISAAC… ¡CUANDO DIOS SE LO PIDIÓ!

Y al hacer eso, todos los deseos y sueños para la vida de Isaac, y hasta su propia esperanza de tener un patrimonio importante, desaparecieron. Sin embargo, Dios devolvió a Isaac a su padre. ¡La familia de Abrahán, se volvió tan numerosa como las estrellas del cielo, y como la arena de la orilla del mar.

Gálatas 4:4 dice, Cuando se cumplió el tiempo señalado, Dios envió a Su Hijo. Esta es exactamente la forma como Dios lidia con cada una de Sus hijas… ¡cuando nosotras realmente nos sacrificamos! ENTREGAMOS TODO LO QUE POSEEMOS, y aceptamos pobreza, ¡ENTONCES ÉL NOS MANDA RIQUEZA!

Dejamos un área boyante del ministerio -- porque Dios nos lo pide – ¡ENTONCES ÉL NOS DA UN MINISTERIO MEJOR! Nosotras le entregamos nuestras esperanzas al negarnos a nosotras mismas… ¡ENTONCES ÉL NOS MANDA ALEGRÍA! Y como Jesús “nos promete” en Juan 10:10, “para que tengamos vida abundante.”

Y EL REGALO MÁS GRANDE DE TODOS ES NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO MISMO. Nunca podremos comprender completamente la enormidad de Su sacrificio.

Abrahán, como el padre de la familia terrenal de Cristo, tuvo que comenzar a entregarse a sí mismo “y a su único hijo”; de la misma forma que nuestro Padre Celestial sacrificó a Su único Hijo, JESÚS.

La historia de Abrahán e Isaac me hace acordar a la gracia de Dios en mi vida. Hace 25 años, mi esposo y yo nos construimos una casa linda, con una vista preciosa de las montañas. ¡Estábamos fascinados!

Sin embargo, al poco tiempo de mudarnos a la nueva casa, nuestra situación económica cambió radicalmente… ¡PARA MAL! Pagar la hipoteca de la casa se hizo dificilísimo. Pero mi esposo y yo decidimos, que salvaríamos nuestra bella casa , a como diera lugar.

Como Isaac, PARA ABRAHÁN, nuestra casa se había convertido en un ídolo para nosotros. Mes tras mes… pagar la hipoteca se volvió un sacrificio. Pero ambos estábamos aferrados a esta casa. ¡Era nuestra casa después de todo! Y pasó un año… luego dos… y luego tres. Ya no podíamos más. ¡La presión era terrible!

Así que le dijimos… “Señor, ya no damos más. Te devolvemos la casa. ¡ES TUYA! Nos construiremos una casa más chiquita. ¡Haremos lo que Tú quieras, Señor !” Se lo dijimos en serio… ¡de todo corazón! Inmediatamente llamamos a una corredora de bienes raíces para vender la casa.

Ella vino a ver la casa… le encantó… se redactaron todos los papeles… y cuando estábamos a punto de firmarlos, Dios puso en mi corazón que tratara primero de refinanciar la casa. ¡Porque los intereses acababan de bajar! ¡Y ASÍ LO HICIMOS!

Y POR LA GRACIA DE DIOS, la casa se refinanció… Los pagos se hicieron más fáciles. Y hasta el día de hoy (25 años después), todavía seguimos en la misma casa. ¡Pero fue nuestra actitud la que había cambiado! La casa es del Señor… ¡NO ES NUESTRA!

Y el día que Él diga que nos mudemos, ¡NOS MUDAREMOS! ¡DIOS BENDICE LA OBEDIENCIA! Así como Isaac se había convertido en la adoración de Abrahán, ASÍ MISMO, nuestra casa se había convertido en nuestra adoración también.

¡Así como Abrahán le entregó a Dios a su hijo Isaac, Y DIOS SE LO DEVOLVIÓ … así Dios nos devolvió nuestra casa… ¡cuando estuvimos dispuestos a entregársela!

¿A qué te estás aferrando que se ha convertido en un ídolo para ti? ¿Estás dispuesta a entregárselo a Jesús? ¿Posees algo, que no estás dispuesta a dejar ir… ¿SI DIOS TE LO PIDIERA? ¿Tratas a tus posesiones como si fueran tuyas, ¿Y NO DE DIOS?

¡ASI QUE! YA VIMOS TODO LO QUE LA ENTREGA A DIOS – PARTE UNO, CONLLEVA, AHORA VAYAMOS A LA…

II. ENTREGA A DIOS – PARTE DOS – Lucas 9:23-24

23Si alguno quiere seguirme, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día , y sígame. 24Porque todo el que quiera salvar su vida, LA PERDERÁ, y todo el que pierda su vida, por causa de Mí, la salvará.”

¿Queremos realmente estar con Jesús y experimentar Su Presencia? Él nos dice cuál es el precio – tenemos que tomar nuestra cruz CADA DÍA, y seguirlo. A pesar de que mucha gente “interpreta esto” como un llamado al sufrimiento, hay un significado más profundo en todo esto.

Las palabras de Jesús pueden implicar sufrimiento y adversidad, ¡SI! Pero ese no es Su único propósito. Su propósito principal es llamarnos “A ESCOGER” entre nuestro propio señorío… ¡Y EL SUYO! No podemos realmente adorar a Jesús, y experimentar Su Presencia hasta que no nos neguemos a nosotras mismas.

Jesús fue muy claro cuando dijo que no podemos servir a dos señores. Él lo dijo en el contexto del dinero, pero esta verdad aplica a todas nuestras relaciones.

Aunque nuestros deseos “Y LOS SUYOS”, muchas veces coinciden, y nuestros planes y los Suyos muchas veces se alinean, tenemos que escoger quien va a estar a cargo del otro. En esta relación entre lo humano y lo divino , SOLO UNO, puede tomar la iniciativa. ¡Y ESE ES JESÚS!

Algunas personas tratan de crucificar sus personalidades, juntamente con sus dones y deseos, como si Dios quisiera que la relación fuera todo acerca de Él, y nada de nosotras. Para comenzar, si Dios quisiera eso, ¿para que nos creó entonces? Él ya experimentó tener “nada de nosotros.”

¡NO! Es nuestra AUTO-SUFICIENCIA, y nuestra búsqueda de REALIZACIÓN PERSONAL… ¡LAS QUE NECESITAN IR A LA CRUZ! No podremos seguirlo, y conocer Su Presencia , hasta que no lo hagamos.

Pero si no podemos dejarlas ir, y permitir que nuestra agenda se incline a la de Él ,nosotras no podremos CONOCERLO PROFUNDAMENTE, ni experimentarlo completamente.

Y como ya vimos anteriormente, la cruz no es un símbolo de las dificultades que tendremos que aguantar en esta vida. Más bien, representa el lugar de muerte. “Y tomar nuestra cruz”, es declarar, que nuestro futuro , le pertenece exclusivamente a Dios.

David Livingstone escribió, “Señor, mándame a cualquier lugar, solo anda conmigo. Pon cualquier peso sobre mí, solo sostenme. Y rompe todo vínculo, menos el vínculo que me ata a Tu corazón, y a Tu servicio.”

Muchas de nosotras queremos que Dios nos hable y nos guíe a Su voluntad. Queremos la emoción de que Dios obre A TRAVÉS NUESTRO, pero no nos gusta la idea de tener que hacer grandes cambios en nuestra vida … ¡PARA QUE ÉL LO HAGA!

La Biblia revela, que cada vez que Dios le hablaba a Su gente, acerca de lo que Él quería hacer , ellos tenían que realinear sus vidas de alguna forma. Cuando la gente de Dios estaba dispuesta a tomar la acción necesaria, Dios llevaba a cabo Sus propósitos… por medio de aquellos… AL QUE ÉL LES HABLABA.

¡TÚ NO PUEDES QUEDARTE DONDE ESTÁS, E IR CON DIOS A LA MISMA VEZ! Cuando Dios habla -- revelando lo que Él está a punto de hacer -- esa revelación es tu invitación a adaptar tu vida “A LA DE ÉL”. CUANDO ADAPTAS TU CORAZÓN Y TU MENTE A DIOS -- A SUS PROPÓSITOS Y SUS CAMINOS -- estarás en posición de obedecer.

TÚ NO PUEDES QUEDARTE DONDE ESTÁS, E IR CON DIOS AL MISMO TIEMPO. Esta verdad ES MUY CLARA EN LAS ESCRITURAS: Por ejemplo, (1) Noé no podía continuar su vida, como siempre, y edificar un arca al mismo tiempo . (2) Abram no podía quedarse en Ur, o en Harán, y ser el padre de la nación de Canaán.

(3) Moisés no podía quedarse pastoreando ovejas en el desierto, y estar delante del Faraón al mismo tiempo. (4) Rut no podía quedarse con sus familiares en Moab, y unirse al pueblo de Dios en Israel, a la vez . (5) David tenía que dejar a sus ovejas para convertirse en rey.

(6) Ester no podía quedarse callada ante el rey, y a la vez, salvar a su gente. (7) Pedro, Andrés, Jacobo y Juan tenían que dejar su negocio de pesca, para seguir a Jesús. Y (8) Saúl tenía que cambiar de dirección completamente para que Dios lo usara para predicar el evangelio a los gentiles.

GRANDES CAMBIOS Y AJUSTES SE REQUERÍAN, cuando la gente de Dios decidía obedecer al llamado de Dios. Algunos tenían que dejar a su familia, y a su país. Otros tenían que abandonar LOS PREJUICIOS QUE TENÍAN, y reorientar su manera de pensar.

Hombres y mujeres estaban dispuestos a dejar atrás sus metas, sus ideales, y sus deseos. Todo se le tenía que entregar a Dios… ¡ y su vida entera tenía que adaptarse a Dios!

En el momento en que hicieron los cambios necesarios, Dios comenzó a llevar a cabo Sus propósitos por medio de ellos. Cada uno aprendió, que adaptar su vida a Dios … ¡es siempre un precio que vale la pena pagar!

Tú podrás estar pensando: “Pero Dios no me ha pedido que haga ningún “gran cambioen mi vida.” Si buscas en las escrituras para poder entender a Dios, verás que definitivamente, Dios requiere cambios en Su gente. ¡Su propio Hijo dio más que nadie!

2 Corintios 8:9 dice, “Pues ustedes ya conocen la gracia de nuestro Señor Jesucristo que, “por amor a ustedes,” siendo rico se hizo pobre, para que con Su pobreza ustedes fueran enriquecidos.”

Jesús se despojó de su posición y de la gloria del cielo, para unirse al Padre en proveer salvación por medio de Su muerte en la cruz. Jesús no podía quedarse ADONDE ESTABA EN EL CIELO -- y a la vez, ser parte del plan del Padre para redimir a la humanidad en la tierra. Si eres discípulo de Jesús… ¡no tienes otra alternativa!

¡Tú tendrás que hacer cambios significativos en tu vida! Seguir a tu Señor significa ir a donde Él va. Hasta que no estés lista para hacer los cambios necesarios -- para seguir y obedecer lo que Dios te ha dicho que hagas -- tú serás de muy poco uso para Él.

Nuestra tendencia es de querer que Dios se acomode a nuestros planes. Queremos obedecer a Dios, ¡SI! PERO SOLO… ¡ de la manera que nosotros queremos! ¡SUS MANERAS SON MUY DIFERENTES A LAS NUESTRAS!

El joven rico le preguntó a Jesús en Lucas 18:18-27, “Maestro, bueno, ¿qué puedo hacer para HEREDAR la vida eterna?”

Jesús le contestó, Vende todo lo que tienes, y dáselo a los pobres, así tendrás un tesoro en el cielo. Después de eso, ven y sígueme.” El hombre rico no estuvo dispuesto a pagar el precio que Jesús pedía.

Su riqueza se interpuso con su deseo de seguir a Jesús. Jesús sabía que este hombre no podría servir a Dios totalmente… ¡y estar aferrado a su dinero al mismo tiempo! Así que le dijo al joven aristócrata que se deshiciera de todo aquello que se había convertido en un dios para él – ¡SU RIQUEZA! ¡El hombre no quiso hacer lo que Jesús le pedía!

El Señor sabe LO QUE HAY EN CADA UNO DE NUESTROS CORAZONES, que no nos deja entregarnos completamente a Él… ¡Y SEGUIRLO! Efesios 5:5 dice que la codicia es una forma de idolatría. La prosperidad, Y EL AMOR POR LAS COSAS DEL MUNDO pueden tentarnos… ¡A NO SEGUIR A DIOS!

PAUSA

¿Qué es lo que tenemos que dejar para seguir a Jesús? La respuesta es muy simple. ¡TODO! ¿Pero que ganamos haciendo esto? La respuesta es muy simple ¡TODO!

Adaptar nuestras vidas a Dios significa tener que lidiar con barreras económicas, físicas, emocionales, espirituales y relacionales, que nos impiden obedecer a Dios totalmente. Muchas veces, Dios requiere ajustes en áreas “que nunca antes” hubiéramos considerado.

Pedro nunca se hubiera imaginado que Dios le pediría que entrara a la casa de un gentil. Pero eso es exactamente lo que nuestro Señor le pidió. El hecho de que nunca te imaginaras que pudieras ser maestra de la Biblia, o escritora, o misionera, no significa que Dios nunca te va a pedir que enseñes, o que escribas, o que vayas en un viaje misionero.

¡DIOS ESTÁ BUSCANDO ENTREGA TOTAL! Nosotros tenemos que tener UN CORAZÓN DISPUESTO para hacer cualquier cosa que Dios nos pida. Y luego, confiar en Él para que nos faculte a hacerlo.

Dios nos ama “lo suficiente” para involucrarnos en Su obra, ¡Y SE NIEGA A DEJARNOS DONDE ESTAMOS! Él sabe que nosotras podemos experimentar mucho más de Él. Cualquier cambio “que Dios espera que hagas”, “es para tu bien”, y es para el bienestar de aquellos… ¡que Dios tiene pensado bendecir a través de tu vida!

Cuando yo me convertí al cristianismo hace 25 años, nunca me imaginé todo lo que Dios tenía planeado “HACER EN MÍ”, y a través mío.

Cuando me entregué totalmente a Jesús, Él NO ME DIJO… que algún día sería maestra de la Biblia en español (me tuvo enseñando en inglés por años), o que tendría mi propio programa de radio y televisión, o que mis enseñanzas estarían en YouTube, y Facebook, o que tendría un programa de radio en Lima. Y que haría retiros y conferencias bíblicas en Latino América.

Dios simplemente me dio una tarea a la vez, Y YO SIEMPRE PROCURÉ SERLE FIEL. También descubrí que cada vez que Dios me decía que hiciera algo – sin importar cuán difícil pudiera ser – Él me facultaba para hacer “lo que Él” me había pedido que hiciera.

Una y otra vez, Dios probó ser MUCHO MÁS que solo mi Creador y Salvador. Él ha sido y seguirá siendo mi Sustentador, mi Consejero, mi Consolador, mi Maestro, mi Fuerza, mi Protector, mi Guía, y mucho más. Jesús tenía un plan para mi vida, y lo cumpliría a Su debido tiempo.

Y mientras esperaba a que Su voluntad se cumpliera en mi vida, Jesús me abrió la puerta para ir a la Escuela de Ministerio de mi iglesia. Y cuando terminamos la parte académica de la escuela, nos fuimos en viaje misionero a las reservaciones de los indios Sioux de Dakota del Sur.

Y es ahí, en el campo misionero, que Jesús me habló al corazón, diciéndome que yo tenía mi propia gente. Yo le pregunté: “Señor, ¿quién es mi gente? ¿La mujer peruana? ¿La chilena? ¿La hispana?

Y después de 11 años, cuando ya pensaba, que tal vez, no había escuchado bien al Señor, Dios me volvió a hablar por medio de Su Palabra. Esta vez, a través de Josué 18:3, “¿Hasta cuándo vas a esperar para tomar posesión del territorio que te he dado?” ¡Uy! ¡No lo podía creer!

Y COMO ERA DE ESPERARSE… yo también tuve que hacer cambios en mi vida. Renuncié a los cargos que tenía en el ministerio de damas de mi iglesia.

Yo era maestra bíblica, supervisora del estudio bíblico, y parte del liderazgo. ¡Todo en inglés! Una vez que tomé el paso de fe… ¡Dios comenzó a abrir puertas!

Dios abrió la puerta en el momento preciso, para que enseñara Su Palabra, a la mujer hispana, a través de la radio, televisión, el internet, y dando conferencias bíblicas en América latina.

Hasta me dio una compañera de ministerio súper fiel. ¡Me dio a Nancy! que es mi mejor amiga. Ella ora por mí constantemente. ¡Y hasta nos toma lindas fotos! Dios siempre provee todo lo necesario para hacer Su obra. Y Él tiene un gran plan para tu vida también.

¡Espera en Él! Ten comunión con Dios todos los días… ora y alábalo. Él te hablará: por medio de Su Palabra, por medio de Su Espíritu Santo… por medio de tus circunstancias, y por medio de otros.

Los cambios, que se requieran, son en respuesta directa a la guía de Dios. A veces tomamos decisiones para complacer a nuestra iglesia, o a nuestras amigas, o a nuestros padres, y esas puede que sean, O NO, buenas decisiones.

Complacer a Dios es más importante que complacer a las amigas, a los pastores, y hasta a nuestras familias. ¿Alguna vez te has preguntado… ¿que si cambios importantes son siempre necesarios para seguir a Dios?

Siempre que vayas DE DONDE ESTÁS, a donde Dios está obrando, O DE TU MANERA DE PENSAR a la manera de pensar de Dios, O DE TUS MODOS a los modos de Dios, O DE TUS PROPÓSITOS a Sus propósitos, ¡INVOLUCRARÁ UN CAMBIO IMPORTANTE!

ENTREGA TOTAL involucra entregarle a Dios nuestros deseos, nuestras metas y preferencias, y aceptar la voluntad de Dios… ¡sin importar cuán difícil sea!

SI DIOS NO ESTÁ OBRANDO EN TI , ¡tú no podrás “hacer nada” para dar fruto espiritual!

Por eso Dios dice en Isaías 46:9-11, “Yo soy Dios, y no hay otro…. Mi consejo permanecerá, y todo lo que quiero hacer lo haré.” Ya lo he dicho, y lo haré venir; ya lo he pensado, y así lo haré.”

Cuando Dios se propone hacer algo… ¡ÉL NOS GARANTIZA QUE SUCEDERÁ! Él es el Único “que llevará a cabo” lo que tiene pensado hacer. Si tú dependes de cualquier otra cosa -- QUE NO SEA DIOS -- ¡TUS ESFUERZOS FRACASARÁN!

¡ASÍ QUÉ! LES QUIERO PREGUNTAR…

¿Te cuesta mucho seguir a Jesús? Si tu discipulado solo implica “poco o ningún sacrificio”, eso no es adoración. Realmente, tampoco es discipulado. Tanto la adoración como el discipulado, implica ser “un sacrificio vivo”. El sacrificio “es un elemento esencial” en nuestro andar con Jesús.

No hay “tal cosa” como el discipulado sin una cruz, aunque muchas veces, nosotras buscamos una relación con Dios “que no duela.” Pero si estamos “en armonía” con el Espíritu Santo -- y si realmente lo amamos – muchas veces tendremos que enfrentarnos a situaciones incómodas, y hasta difíciles.

Pero Él nos estira, nos moldea, nos doblega, y nos expande. Y como “cualquier otro amor”, ¡Él requiere sacrificio! ¡Siempre!

¿Quieren vivir ustedes una vida de amor y victoria, de valentía, y de poder? ¿Quieren entregarse totalmente a Jesús? ¿Quieren hacer “lo que Él quiere que hagan” para Su reino? Si es así, únanse a mí en oración.

REPITAN ESTA ORACIÓN DE ENTREGA DESPUÉS DE MÍ… RECUERDEN QUE LE ESTÁN HABLANDO A JESÚS… DE CORAZÓN A CORAZÓN.

Señor Jesús, Me quiero entregar completamente a ti. Tú eres mi Señor y mi Rey. Toma control de mi vida. Y como dijo el rey Ajab, lo digo yo también. ¡Todo lo que tengo le pertenece a Su Majestad!”

¡QUIERO NEGARME A MÍ MISMA! Quiero que seas mi Señor de “TODO”. El Señor de mi familia. El Señor de mi futuro, de mi corazón, de mis pensamientos, mis sueños, y mis planes. El Señor de mi matrimonio. De mis relaciones. El Señor de mis finanzas. Cámbiame por el poder de tu Espíritu Santo.

¡SEÑOR JESÚS… ¡ESTE ES MI MOMENTO DE ENTREGA TOTAL! ¡OBRA ESTA ENTREGA EN MI VIDA – CADA DÍA… EN CADA MOMENTO… HASTA EL DÍA QUE ME INCLINE ANTE TÍ EN LA ETERNIDAD! En el nombre de Jesús. Amén y Amén.