Arturo Gossip dijo que el Nuevo Testamento es la cosa más feliz en la literatura de la Biblia, CON EL SONIDO DE CANTOS POR TODAS PARTES, comenzando con el coro de ángeles sobre Belén, y terminando con el Coro de Aleluyas de los redimidos.

La felicidad y el gozo no son palabras sinónimas… como podría parecer a primera vista. Podrán ser parecidas, pero ahí termina la semejanza. El término felicidad viene del latín “felícitas”, que significa afortunada, tener buena estrella, un buen destino, suertuda en las circunstancias que se vienen por el camino.

Podemos estar felices cuando conseguimos el trabajo que queríamos. Estar felices cuando el doctor nos da buenas noticias. Y estar felices cuando nuestro equipo gana. Sin embargo, el gozo nos libra de la tristeza DE NO HABER CONSEGUIDO ESE TRABAJO; cuando las noticias del doctor no son tan buenas; y cuando nuestro equipo pierde.

Esto es porque el gozo viene, NO DE LAS CIRCUNSTANCIAS, sino de nuestra relación de amor con Dios. Nuestra decisión de confiar EN EL PLAN SOBERANO DE DIOS PARA NUESTRAS VIDAS, apuntala nuestra esperanza en los tiempos difíciles, ¡Y ESO NOS DA GOZO! Cuanto más grande sea nuestro amor por Dios, ¡MÁS GRANDE SERÁ NUESTRO GOZO EN ÉL!

Has crecer tu amor por Dios a través del estudio de la Biblia y la oración, de la adoración y confesión, y de la alabanza y el compañerismo – ¡Y VERÁS COMO TU GOZO AUMENTA! La vida es muy corta y dura para despilfarrarla por falta de gozo, ¡NI SIQUIERA POR UN DÍA!

En Juan 17:13 Jesús le ora al Padre, Pero ahora voy a Ti; y hablo de esto en el mundo, para que Mi gozo se cumpla en ellos mismos. Si hay algo que debiera caracterizar la vida de la cristiana, ¡ES EL GOZO!

Jesús, muchas veces, les habló a los discípulos acerca de Su gozo, QUE ERA LLENO Y COMPLETO EN ELLOS. Los discípulos se llenaron de gozo cuando se dieron cuenta ¡DE QUIENES ERAN ELLOS: ¡Eran hijos de Dios y coherederos con Cristo!

Por eso Romanos 8:16-17 dice, El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.17 Y si somos hijos, somos también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos JUNTAMENTE CON ÉL, para que juntamente con Él seamos glorificados.

No te niegues a ti misma lo que es tu patrimonio, como hija de Dios. No te sientas satisfecha… ¡CON UNA VIDA SIN GOZO! Debería haber, EN TODA CRISTIANA, una plenitud muy profunda del gozo de Cristo, QUE NINGUNA OTRA CIRCUNSTANCIA DE LA VIDA, PUEDE DISIPAR.

Esto viene cuando permites que el Espíritu Santo SE EXPRESE A SÍ MISMO EN TU VIDA. Uno de los frutos del Espíritu es el GOZO. Este gozo es totalmente diferente a cualquier felicidad producida por el mundo. ¡TE LLENA E IMPREGNA TODO LO QUE HACES! Jesús no oró para que tú fueras simplemente feliz, o para que te libraras del sufrimiento.

¡NO! El oró para que tuvieras el mismo gozo que el Padre le había dado a Él – UN GOZO DIVINO – UN GOZO QUE VIENE DE UNA RELACIÓN PROFUNDA E INQUEBRANTABLE CON EL PADRE. Es un gozo que está basado, TAN FIRMEMENTE EN UNA RELACIÓN CON DIOS, que ninguna circunstancia puede sacudir.

Esta es la clase de gozo que Cristo está orando para que haya en ti. Las circunstancias externas no determinan tu gozo. El gozo viene de adentro, de una relación con Cristo. De una vida llena del Espíritu, que se caracteriza por un gozo inquebrantable.

El gozo viene de saber que hemos sido perdonadas de todo pecado, nacidas a la familia de Dios, y tenemos una relación personal con el Padre Celestial. Sin importar cuales sean tus circunstancias, LA SALVACIÓN MISMA es la causa de gran regocijo.

Hechos 16:25 dice, A la medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios, mientras los presos los escuchaban. El verdadero gozo viene de saber, QUE DIOS MISMO VIVE EN TI, y que tiene comunión contigo, A PESAR DE TU MEDIO AMBIENTE.

Gozo real descansa en el conocimiento DE QUE EL DIOS SANTO TE HA PERDONADO COMPLETAMENTE DE TODO PECADO, y aun ahora, ÉL TIENE PREPARADO UN HOGAR PARA TI EN EL CIELO donde podrás pasar la eternidad con Él.

¡Las circunstancias de tu vida no pueden cambiar estas verdades! Pablo y Silas se estaban enfrentando a una de las circunstancias más difíciles IMAGINABLES. Fueron acusados falsamente, arrestados, y encarcelados. Fueron golpeados y encadenados a la sección más fría y oscura de la prisión.

¡Pero ellos no permitieron, QUE SU TERRIBLE SITUACIÓN, disminuyera su gozo. Ellos no le echaron la culpa a Dios POR PERMITIR QUE ESTAS COSAS LE PASARAN A ELLOS. En vez de eso, ¡ELLOS ALABARON A DIOS POR SU BONDAD! En la oscuridad de la noche, ¡ELLOS ORARON Y CANTARON! ¡Y DIOS LOS LIBERÓ DE SUS CADENAS!

Pero tal vez, EL MILAGRO MÁS GRANDE FUE QUE EL ESPÍRITU SANTO LOS PUDO LLENAR TANTO, que aun en su doloroso encarcelamiento, ¡ELLOS DESBORDABAN CON GOZO!

No permitas que los eventos difíciles ANULEN EL GOZO DE SABER que eres una hija de Dios. Permite que el Espíritu de Dios te llene con Su gozo inagotable, y tu vida será un milagro para aquellos que te observan cuando te enfrentas a las pruebas que se te vienen en la vida.

Habacuc 3:17-18 dice, Aunque todavía no florece la higuera, ni hay uvas en los viñedos, ni hay tampoco aceitunas en los olivos, ni los campos han rendido sus cosechas; aunque no hay ovejas en los rediles ni vacas en los corrales, 18 YO ME ALEGRO POR TI, SEÑOR; ¡me regocijo en Ti, Dios de mi salvación!

A veces parece que todo alrededor tuyo se está derrumbando. Los negocios, en los cuales invertiste, pueden fallar. Gente a quienes les has ministrado puede desilusionarte. La empresa o carrera, la cual trabajaste duro para edificar, puede hundirse.

En esos días, AUN CUANDO SEAN DIFÍCILES, son oportunidades para “PARAR Y EXAMINAR” lo que realmente es importante para ti. Habacuc presenció el fracaso de la mayoría de las cosas que eran importantes para él.

Sin embargo, a través de la pérdida, el fracaso y el desaliento, él pudo distinguir ENTRE LO QUE ERA MÁS PRECIOSO PARA ÉL, y lo que era solo transitorio y vacío. Llegó a tal punto, que pudo decir sinceramente, QUE SI TODO ALREDEDOR SUYO FALLABA, él todavía se iba a regocijar en Dios.

¿Y tú? ¿SE ESTÁN CAYENDO LAS COSAS A PEDAZOS ALREDEDOR TUYO? ¡TÚ TODAVÍA PUEDES ALABAR A DIOS! Tu alabanza a Él no depende del éxito de tus esfuerzos, ¡SINO EN LA NATURALEZA DE DIOS Y SU FIDELIDAD Y SU AMO R POR TI!