Mientras cruzaban el océano por barco -- hace muchos años -- le pidieron a F.B. Meyer, famoso autor y maestro bíblico, que les diera una charla a los pasajeros. Un agnóstico escuchó el mensaje de Meyer, acerca de la oración, y le dijo a un amigo, “No creo ni media palabra de lo que dijo”.

 

Más tarde en aquel día, el agnóstico fue a escuchar a Meyer hablar a otro grupo de pasajeros. Pero antes de ir a la reunión, él cogió dos naranjas y se las puso en el bolsillo. A lo que iba, pasó delante de una señora que estaba profundamente dormida en su silla de la cubierta.

 

Sus brazos estaban extendidos y sus manos estaban totalmente abiertas. No se pudo contener, y decidió hacerle una pasada. Le puso las dos naranjas… una en cada  mano. Después de la reunión, el vio a la señora feliz comiendo una de las naranjas. “Usted parece estar disfrutando esa naranja, le dijo con una sonrisa. “Si, señor”, contestó ella.

 

“Mi padre es muy bueno conmigo”  “¿Qué quiere decir?” insistió el agnóstico. Ella le explicó. “He estado mareada por varios días en el barco. Le estaba pidiendo a Dios “que de alguna forma” me mandara una naranja.

 

Me quedé dormida mientras oraba. Cuando me desperté, me di cuenta que El me había mandado no solo una naranja… ¡SINO DOS NARANJAS! El agnóstico estaba admirado POR LA CONFIRMACION “TAN RAPIDA” DE LA CHARLA DE MEYER ACERCA DE LA ORACION.

 

Al poco tiempo, el agnóstico le entregó su vida a Cristo. ¡SI! ¡DIOS CONTESTA LA ORACION! ¡EL SIEMPRE NOS DA LO QUE LE PEDIMOS… ¡O ALGO MUCHO MEJOR!

¿Funciona la oración realmente? ¿Cuál es tu opinión acerca de la oración? ¿Anhelas tener una vida de oración más satisfactoria? ¿Están siendo tus oraciones contestadas?

 

Santiago 5:16b dice, La oración del justo es muy poderosa y efectiva. Dios les promete a todas las creyentes  -- QUE SI SOMOS JUSTAS Y ORAMOS FERVIENTEMENTE -- nuestras oraciones serán efectivas y producirán resultados significativos. ¿Cómo tratamos una promesa como esta? A lo mejor dices, ”PERO YO ORO… ¡Y NADA PASA”!

 

Nuestro problema es que no obedecemos lo que la Escritura enseña. La Palabra de Dios dice que la oración debiera lograr mucho. Si nuestra vida de oración no está logrando mucho, ¿QUE ES LO QUE DEBEMOS HACER? Si nosotras estamos orando, pero no estamos viendo resultados… ¿DEBEMOS CONCLUIR QUE ESTA PROMESA NO ES VERDAD?

 

¿Debemos llegar a la conclusión de que esta Escritura es impráctica y poco realista? ¿O nos debemos examinar “a nosotras mismas” para ver si estamos cumpliendo con sus condiciones? Santiago dice, que la oración del justo es muy poderosa y efectiva”. ¿No será que nosotras no somos tan fervientes en nuestras oraciones como debiéramos ser?

 

Una oración ferviente significa que no nos damos por vencidas tan fácilmente. La oración ferviente significa QUE NOSOTRAS, DELIBERADAMENTE, PASAMOS EL TIEMPO SUFICIENTE EN INTERCESION. La oración ferviente significa que clamamos al Padre, A VECES CON LAGRIMAS EN LOS OJOS, con todo nuestro corazón y alma.

 

Una oración ferviente… VIENE CUANDO EL ESPIRITU SANTO NOS AYUDA EN LA ORACION CON LAMENTOS PROFUNDOS. Por eso Romanos 8:26 dice, El Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad, pues no sabemos qué nos conviene pedir, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.

 

¡SEGÚN SANTIAGO, NUESTRA JUSTICIA NOS ASEGURA UNA ORACION EFECTIVA!

 

El estándar de la justicia de Dios es diferente al nuestro, porque El mira más allá de nuestras acciones, hasta más allá de nuestros pensamientos… ¡EL MIRA DIRECTAMENTE A NUESTROS CORAZONES! ¿Qué debemos hacer si nuestras oraciones no están logrando mucho?

 

Si nada pasa cuando oramos… ¡EL PROBLEMA NO ES CON DIOS! El problema es con nosotras, ya que la Palabra de Dios es absolutamente confiable. Si nos adherimos a lo que Dios requiere, El nos va a guiar a orar por las cosas que se alinean con Sus propósitos, y Dios contestará nuestras oraciones de una forma poderosa.

 

En 1857 un misionero llamado Jeremias Lanphier quiso comenzar “un grupo de oración semanal” con los hombres de negocios de la Baja Nueva York. El pensaba que a algunos hombres les gustaría orar durante las horas en que los negocios estaban cerrados.

 

Así que repartió volantes invitando a muchos hombres “del distrito” a que vinieran a orar. Pero cuando llegó la hora del primer día de la reunión… ¡NO HABIA LLEGADO NADIE! Unos cuantos rezagados comenzaron a llegar durante la hora.

 

Pero los pocos que fueron, se entusiasmaron tanto, que se pusieron de acuerdo, a reunirse de nuevo la próxima semana y la próxima, y la próxima…y después de seis meses, más de “diez mil hombres” se estaban reuniendo para orar.

 

Avivamientos y cientos de conversiones comenzaron a suceder en las zonas cercanas, y también en zonas más alejadas. ¡UN MOVIMIENTO ESPIRITUAL HABIA COMENZADO! Historias similares se cuentan de otros movimientos históricos de oración –como la Hermandad de Moravia, el avivamiento de Corea, y muchos otros.

 

En realidad la historia ha sido moldeada “más profundamente” POR GUERREROS DE ORACION DESCONOCIDOS… que por los famosos nombres y retratos que ponemos en nuestros libros.

 

Cuando Dios responde a las oraciones de Su gente, las mareas cambian y las tendencias “ceden el paso” a las corrientes de Su Reino. Dios está edificando algo magnifico, por medio de las oraciones, y la fe de los ciudadanos del Reino de los cielos.

 

¡ASI QUE! ¡CONECTATE CON LA FUENTE DE VIDA! Tú tienes más influencia en este mundo de lo que crees.

 

Como Jeremías Lanphier y muchos otros antes y después de él, ellos creen que clamándole a Dios POR SUS PROPOSITOS es mucho más poderoso que tratar de forjar nuestros propios propósitos. Una vida dedicada a la oración cambia el curso de la historia, y bendice a un mundo que rechaza a su propio Creador.

 

Te pone en una posición de autoridad sin importar cuan limitado pueda ser tu poder en esta tierra. ¡TE HACE SOCIA DE DIOS EN SU MISION DE RESCATAR, REDIMIR, Y RESTAURAR LAS VIDAS DE MUCHA GENTE!

16 Oren unos por otros, para que sean sanados. La oración del justo es muy poderosa y efectiva.

 

Cuando oramos por otros, nos convertimos en socias de Dios en Su obra de salvación, sanación, consuelo y justicia. Dios puede llevar a cabo todas estas cosas sin nosotras, PERO EN SU PLAN PERFECTO, El nos da el privilegio de estar involucradas con El, por medio de la oración.

 

Por ejemplo, cuando intercedemos por un nieto que está en problemas, o una madre que tiene que ser operada, o una vecina que necesita a Cristo, nosotras le pedimos a Dios que provea por esa persona… lo que nosotras no podemos proveer.

 

Nosotras estamos actuando como intermediarias, pidiéndole a Dios que dirija Su poder en una dirección específica. La vida de Jesús nos da el modelo de nuestras vidas de oración. Dios está buscando moldearnos a la imagen de Su Hijo. Si vamos a actuar como Cristo, nuestra vida de oración debe de estar conformada con la de El.

Dios busca a aquellas cuyos corazones están preparados para interceder ante El. Las intercesoras tienen corazones que están en sintonía con el corazón de Dios.

 

Tal vez nosotras no intercedemos… ¡PORQUE PENSAMOS QUE ESTAR OCUPADAS EN NUESTROS MINISTERIOS ES MAS EFECTIVO QUE LA ORACION! ¡PERO JESUS ADVIRTIO QUE SIN EL, NADA PODEMOS HACER!

 

Si no estamos familiarizadas íntimamente con Dios y Su voluntad, todo nuestro trabajo será en vano. La oración no es una varita mágica para satisfacer nuestros propios deseos, sino es una oportunidad para trabajar con el Señor… ¡PARA REALIZAR SUS PROPOSITOS! Santiago nos dice que la oración del justo es muy poderosa y efectiva.

 

¡LA ORACION ES LA TIERRA “EN QUE LA ESPERANZA Y LA SANACION” CRECEN MEJOR! Así que oremos humildemente y de todo corazón el uno por el otro. ¡LA POSICION MAS PODEROSA “EN ESTA TIERRA” ES LA DE ESTAR DE RODILLAS… ANTE EL SEÑOR DEL UNIVERSO!